La entrevista de trabajo es un paso fundamental en la relación entre un posible contratado y el contratante. Aprende como debes comportarte ante un reto tan importante.
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Instrucciones
Cuando vamos a una entrevista de trabajo debemos tener una serie de cuestiones presentes para que las cosas salgan bien y siempre podamos lograr una buena impresión. Buscar trabajo no es tarea sencilla en estos tiempos, una entrevista de trabajo es una oportunidad única que es bueno saber aprovechar.
En primer lugar es importante que nuestra presencia sera acorde con el tipo de entrevista laboral que vamos a realizar. Esto no quiere decir que nuestra ropa sea totalmente formal, sino que debemos intentar ajustarnos a las diferentes situaciones y estéticas de los lugares a los que elijamos ir. Muchas personas se fían de las apariencias de las personas al momento de elegir ubicarlas en un puesto laboral, por lo que si estás interesado en no perder oportunidades, es importante que sepas fijarte en este detalle.
Otro factor clave en una entrevista de trabajo es la buena dicción y el correcto modo de hablar. Si consideras que no eres bueno con esto es momento de que intentes practicar ejercicios de oratoria que te permitan aprender a interactuar más elocuentemente con otras personas. La capacidad de transmitir ideas de un modo claro, la simpleza pero precisión de las palabras y el buen modo en la pronunciación son características importantes y aprovechables en cualquier puesto de trabajo, por lo que podemos sumar un punto si tenemos esa cualidad a favor.
Saber responder las preguntas en entrevista de trabajo hará que nuestro interlocutor se quede muy conforme con nosotros, porque en estos casos a lo último que hay que darle lugar es al silencio. Tratar de no dudar para responder ciertas preguntas y tener la capacidad de dilucidar correctamente lo que el otro desea saber son cualidades positivas para tener en cuenta.
Cuidar la gestualidad es importante también ya que nuestro cuerpo habla mucho de nosotros, más de lo que creemos. Quizás tomar conciencia de los movimientos que realizamos constantemente con las manos ayude a saber si nos excedemos al punto de marear o si somos muy rígidos y quietos. Todo genera una impresión determinada por eso nunca viene mal tener en cuenta este tipo de detalles.